C/ San Francisco, 9
En 1550 llegaron a Baena los primeros religiosos de la Orden de San Francisco, siendo su protectora Doña María de Mendoza y Sarmiento, esposa del primer Duque de baena, construyendo la iglesia, claustro y convento, aunque la obra actualmente existente es del S. XVII.
La iglesia es de una sola nave con crucero, cubierto con bóveda de medio cañón con fajones y lunetos. Todos los muros están adornados con pinturas constituídas por decoración de rocalla, que dan al conjunto impresionante aspecto.
La puerta principal del templo es muy sencilla, data del S. XVIII. Dos pilastras toscanas flanquean la puerta adintelada. Más simple aún es la otra portada que da a una calle lateral, con frontón completo y pináculos piramidales, del S. XVII.
El retablo mayor es de madera tallada y policromada de 1740. En esta iglesia se encuentra la venerable imagen del patrón de la ciudad.